La pelota detenida en contra es un tema sin solución para Boca en este 2022. Una situación que desde el verano le generó dolores de cabeza a Sebastián Battaglia y que no logra corregir, más allá del apellido de turno en cuestión que conforme la zaga central (anoche jugaron Zambrano y luego Figal con Gastón Ávila) y tampoco identifica que no debe cometer infracciones cerca del área de Agustín Rossi, héroe en el Monumental frente a River que dejó dudas ante Arsenal y anoche en Cali.
El gol de Guillermo Burdisso (ex Boca, claro) fue por una desatención tras un tiro libre que obsequió Ávila con una pelota que pudo resolver fácil. El arquero, en esa situación, quedó a merced de un desvío para sufrir un tanto que también padeció ante Colón (Beltrán), Independiente (Togni) y Huracán (Cóccaro). Contra Estudiantes de La Plata – un equipo especialista en esa faceta- estuvo cerca de pagarlo en una última jugada y con River, las manos de Rossi solucionaron imperfecciones desde ese lado. Incluso ante Central Córdoba por la Copa Argentina el tanto llegó por un envío aéreo, también con Figal y Ávila compartiendo la dupla central.
Benedetto no tuvo una buena noche, como todo Boca. (AP Photo/Fernando Vergara)
La defensa de Boca, desorientada, imprecisa, insegura durante todo el encuentro y evidenciando que las ausencias de Carlos Izquierdoz y de Marcos Rojo en la última línea (ambos suspendidos más allá de la lesión del capitán) serán complejas en toda la primera etapa. Para colmo, el peruano Zambrano se lesionó y solo quedan los juveniles Alvariño y Gabriel Aranda en la lista de centrales. ¿Habrá una chance para probar a Agustín Sández como zaguero? Ya lo hizo en esa posición en la Reserva el lateral izquierdo.
Las desatenciones en el choque ante Deportivo Cali ya no solo fueron desde tiros de esquina o tiros libres, también en la primera etapa Boca lo sufrió desde los laterales que cayeron en el área, sin marca, y con los futbolistas vestidos de amarillo mirándose entre todos. Algo que ya no solo marcaron desde Juan Román Riquelme, sino también Sebastián Battaglia y el capitán Marcos Rojo, en la última fecha frente a Arsenal, después de un grosero error defensivo. No se corrige.
Gastón Avila mostró muchas dudas en el fondo. (AP Photo/Fernando Vergara)
En lo que va del 2022, Boca solo pudo sostener el arco en cero justamente frente a Estudiantes de La Plata y River (quizá los rivales más complejos hasta aquí) en los 10 encuentros que disputó (le marcaron 11 tantos) Una fragilidad que en la Copa Libertadores se paga demasiado caro. Como en Cali.