Un fuerte revuelo se ha desatado en la jefatura de la Policía de Córdoba, donde varias mujeres policías han alzado la voz para denunciar casos de acoso. Según información de Cadena 3, se descubrió que alguien estaba utilizando un celular para tomar fotos de las compañeras mientras se encontraban en el baño del área de medicina laboral.
Una de las afectadas, que ha estado en tratamiento psiquiátrico por más de dos meses, compartió su experiencia, relatando que en un momento inesperado “de pronto vio una mano con un celular”. “No sé quién me estaba espiando”, expresó con evidente angustia.
La investigación está siendo llevada a cabo por el Polo de la Mujer y ha revelado que un cabo de la misma Policía tenía en su teléfono una cantidad significativa de fotos y videos de sus compañeras. A pesar de la seriedad de las acusaciones, el uniformado ha sido separado de su cargo, pero aún no enfrenta imputaciones formales.