La fábrica de ollas Essen en Venado Tuerto atraviesa una de las crisis más profundas de su historia reciente. La compañía anunció más de 30 despidos, reducción de turnos y reorganización de varias líneas de producción, en un contexto marcado por la baja del consumo interno y el avance de importaciones desde China que reemplazan etapas históricas de fabricación local.
Según delegados internos y el gremio UOM Venado Tuerto, las desvinculaciones afectaron tanto a trabajadores de planta permanente como a personal eventual, alcanzando sectores como fundición, mecanizado y terminación, donde la actividad descendió sostenidamente en los últimos meses.
El secretario general de la UOM, Diego Olave, detalló que la empresa aplicó los despidos en varias etapas: “De los 34 despidos confirmados, 17 son de planta permanente y el resto personal eventual. Estos se suman a ceses anteriores, por lo que el total de bajas recientes supera los 50 trabajadores”, explicó.
La caída de las ventas de ollas de aluminio, sartenes y otros artículos de cocina fue el primer factor que impulsó los recortes. Comercios locales reportaron menor rotación y acumulación de inventario, lo que llevó a frenar turnos, disminuir horas operativas y reorganizar tareas dentro de la planta.
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