Después de casi 140 años se despide una presencia que marcó la historia educativa y espiritual de San Juan
Tras casi 140 años de presencia ininterrumpida, las Hermanas Esclavas del Corazón de Jesús cerraron su ciclo en San Juan, dejando una huella profunda en la educación, la fe y la vida cotidiana de miles de familias sanjuaninas.
La despedida se vivió con emoción en una celebración religiosa realizada en la capilla del Colegio La Inmaculada, en Capital, donde confluyeron exalumnos, docentes, familias y miembros de la comunidad que acompañaron este momento histórico.
La congregación llegó a la provincia en 1886 con una misión clara: formar, acompañar y educar desde valores cristianos. Con el paso de las décadas, ese proyecto inicial se convirtió en una institución de referencia que atravesó generaciones y se integró al entramado social y cultural de San Juan.
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