Con proyecto de ley buscan formalizar la industria Webcam en Colombia

En 2019, el congresista de la Alianza Social Independiente (ASI) Jonathan Tamayo, conocido como ‘Manguito’, logró que en la ley de crecimiento se incluyera un artículo para que personas naturales y jurídicas que trabajan en los servicios de entretenimiento para adultos vía web pagarán retención en la fuente.

Según el diario El Espectador, ahora el senador pretende establecer las buenas prácticas en la industria para que a los modelos webcam, los establecimientos en los que trabajan paguen las prestaciones de ley, cumplan horarios y, además, se les incluya en el sistema de seguridad social integral.

“Se busca que se cumplan con todos los estándares de calidad, garantizandoles a su personal y funcionarios dignificación en su trabajo”, señaló el legislador.

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De igual forma, el diario afirmó que Tamayo, como ponente del proyecto de ley, busca reglamentar este sector para que cumpla con la normatividad tributaria; en palabras del congresista: “regular este sector económico para que contribuya en las finanzas del país.”

Según el congresista, “este sector está generando altas cifras económicas, en su mayoría, dineros que provienen del exterior sin un debido control. Está facturando cerca de USD$40 millones y está generando cerca de 15.000 empleos directos e indirectos”.

Juan Bastos, asesor de modelos y empresario de la industria webcam en Colombia, afirmó al diario El Tiempo, que esta actividad económica ha presentado un gran incremento. “Hace 17 años, Colombia solo tenía de 1.000 a 2.000 mujeres en este mercado. Hoy puede haber más de 40.000, que llegan a producir más de USD$200 millones al año”.

La propuesta del senador Tamayo plantea la necesidad de que las empresas de modelaje webcam estén afiliadas a la Federación de Comercio Electrónico para Adultos (Fencea), un gremio que se originó por mandato de la reforma tributaria aprobada en diciembre de 2019.

“La labor de la Federación de Comercio Electrónico para Adultos (Fencea) será controlar y garantizar que las empresas a las que se les factura la exportación de estos servicios sean totalmente lícitas”, advirtió el senador.

El proyecto también establece que las empresas de webcamers deberán tener certificado de Cámara de Comercio, registro único tributario, certificado de Sayco y Acinpro y certificado de cumplimiento de normas sanitarias y de seguridad.

Otro de los elementos que destacan del proyecto es la importancia de establecer esta actividad como exportación de servicios y no de entretenimiento o de alto impacto.” En varias ciudades del país se han hecho redadas y cierres de estudios dedicados a estas actividades, ya que no están en zonas comerciales, según el Plan de Ordenamiento Territorial de cada ciudad”, señaló a El Espectador el legislador.

Por último, el congresista defendió su proyecto y aseguró que hay que eliminar el estigma que existe alrededor de la profesión, a pesar de que muchas de las personas que trabajan en estos centros son profesionales, incluso con un segundo idioma.

“El sector es un motor de desarrollo para el país, pues el 100% de las divisas percibidas en Colombia se quedan en el país e invierten en la economía local”, concluyó el senador.