Arrancaron en la manga a los cachetazos y terminaron a las trompadas en el túnel, camino al vestuario. Los detalles de la pelea entre Carlos Zambrano y Darío Benedetto, que trascienden después del pedido mutuo de disculpas y la sanción de dos partidos por parte de Juan Román Riquelme, tienen bastante más que ver con escenas más propias de Rocky que una charla caliente en el seno de un plantel de fútbol. Sus compañeros, azorados, intentaron separar. La Policía y los encargados de la seguridad privada también intervinieron. Y todo comenzó en el campo de juego, a la vista del mundo.
Racing había superado de punta a punta a Boca, más allá de su falta de definición, y Benedetto bajó línea. “No pegamos ni una patada”, bramó el goleador. “¿Y vos qué carajo hacés? No le hacés un gol a nadie”, contestó el zaguero central. La respuesta fue un golpe con los nudillos sobre el rostro del peruano, quién reaccionó con un manotazo. “Estaba descontrolado el Pipa”, le confió a Clarín un testigo de la situación.
Y amplió: “Terminó el primer tiempo, entraron puteándose. Uno le decía a otro que no marcaba, el otro que no bajaba y no acompañaba. Y el otro le dice ‘andate a una concha de su madre’, se dieron dos cachetazos y entraron en el túnel y se sacudieron mal”.
Racing vs Boca. Zambrano 14.08.2022 Foto Maxi Failla – FTP CLARIN MAX_6521.jpg Z
Hugo Ibarra no estuvo en el preciso instante en el que los futbolistas xeneizes mostraron sus dotes pugilísticas. Pero se lo contaron, claro. Por eso después del partido reconoció la discusión. No pudo explicar la cara magullada de Zambrano, un claro trompazo en el pómulo izquierdo que se enfocó en primer plano durante la transmisión oficial y se viralizó a través de las redes sociales. De Benedetto se observó un rasguño a la altura del cuello, apenas tapado por la camiseta. Los más minuciosos también encontraron una marca colorada sobre la frente del atacante.
Historias de peleas en el interior de un vestuario sobran. Alejandro Mancuso recordó un mano a mano con Jorge Almandoz, cuando ambos jugaban en Vélez. Y eso que son compadres. Pero quedaron cara a cara por una pelota a la que no llegó el volante y pasaron de los gritos a los empujones. Lo que no deja de llamar la atención es la reacción de Benedetto. “Zambrano sintió que los estaba mandando en cana públicamente”, deslizó un allegado al plantel.
Benedetto es mirado de reojo por algunos compañeros desde que salió a disparar mediáticamente contra Agustín Almendra. Más allá de la falta de respeto que el juvenil tuvo para dirigirse a Sebastián Battaglia, a muchos no les gustó. La palabra “botón” se escuchó en más de una oportunidad. Y hay otra realidad, claro. Hace ocho partidos que el Pipa no la emboca, al margen de los penales que falló contra Corinthians y encendieron la mecha de la discordia por su arenga en la previa, cuando insultó a los dirigentes, muy a pesar de la desmentida posterior. En la buena, algunos se contienen. En la mala, no hay contemplaciones.
El vicepresidente ídolo los levantó en peso en la madrugada de ayer, cuando llegó a la concentración desde Don Torcuato. Les prometió una sanción. “Están al borde de conseguir algo imposible, que los insulte el hincha de Boca”, les dijo. Esta frase hizo ruido interno. ¿Qué pasará mañana en la Bombonera? Ni Zambrano ni Benedetto lo sabrán. Los dos serán suspendidos y no estarán este miércoles frente a Rosario Central, justo ante el equipo de Carlos Tevez, ni ante Defensa y Justicia, este domingo en Florencio Varela.
Se trata de un correctivo. “En la cancha somos hermanos”, le recriminó Román, que durante su época de crack supo no dirigirse la palabra con Martín Palermo. Sobre el verde césped, en cambio, se cansaron de dar vueltas olímpicas.
¿Qué responsabilidad le cabe a la cabeza del Consejo de Fútbol por este encontronazo? Difícil reprocharle la conducta de dos jugadores de 33 y 32 años. Sin embargo, Zambrano y Benedetto forman parte de una estructura inestable. “Pocos disfrutan lo que está pasando en Boca”, cuentan en los pasillos de la Bombonera. Los conflictos se suceden permanentemente. Almendra, Salvio, Izquierdoz, Rossi, Benedetto, Zambrano, Pergolini y un apellido que es el común denominador: Riquelme.
Este mediodía, Boca emitió un comunicado confirmando la sanción de dos partidos para Zambrano y Benedetto. El texto habla de “los hechos sucedidos el pasado domingo” pero no entra en detalles sobre el violento episodio que involucró a los futbolistas.
“El Club Atlético Boca Juniors, luego de los hechos sucedidos el pasado domingo, informa que los jugadores Darío Benedetto y Carlos Zambrano no serán parte del plantel del primer equipo en los siguientes dos partidos”, dice el comunicado.
El comunicado de Boca sobre la pelea entre Zambrano y Benedetto.