
El próximo 22 de noviembre, el Estadio Defensores del Chaco de Asunción se transformará en escenario de un enfrentamiento que promete mantener en vilo a toda Sudamérica. Lanús y Atlético Mineiro se medirán en la final de la Copa Sudamericana, un partido donde cada detalle, cada jugada y cada decisión podría marcar el destino de los protagonistas.
Ambos equipos llegaron tras recorridos destacados, pero la tensión aumenta: ¿quién se alzará con el trofeo? Mientras el “Granate” argentino buscará su tercer título en la historia del torneo, el conjunto brasileño también persigue su gloria continental.
La elección de Asunción no es casual: la ciudad y su emblemático estadio albergarán esta definición que conjuga logística, tradición y misterio. Ahora, jugadores, aficionados y organizadores afinan los últimos preparativos para un encuentro que promete emociones intensas y giros inesperados.

