Seguramente, a fin de año, cuando las copas se eleven para brindar por lo que fue y por lo que vendrá, a Lionel Scaloni se le escapará una sonrisa. Y no es para menos. Lejos quedaron las críticas y los cuestionamientos para con él. Pasó, gracias al trabajo y a los logros, de ser un entrenador apuntado a uno consolidado y ganador. Y a bordo de la Scaloneta ya está en Qatar 2022.
“Lo primero que digo es que clasificamos al Mundial con cuatro fechas de antelación. No me gusta agrandar las cosas, pero es para estar orgullosos. Sabemos que la eliminatoria es durísima porque vemos cómo se dan los partidos. Además, pudimos ganar la Copa América y seguimos con el invicto. El año es magnífico, soñado”, confesó Scaloni en la conferencia de prensa posterior al empate con Brasil. Y avisó: “Ahora vendrán tiempos difíciles y debemos estar preparados”.
“A medida que transcurrieron los partidos fuimos viendo que el equipo estaba consolidado y que había una idea. El resultado final es una consecuencia de lo que queremos. Los jugadores tienen ganas de estar y ninguno piensa que tiene algo asegurado. Transitamos momentos difíciles antes de la Copa América 2019. Pero nos dejó algo positivo. Y a partir de ahí se empezó a gestar algo”, amplió luego en diálogo con TyC Sports.
Siguió: “Quieras o no dependemos mucho de la atmósfera que transmite la gente. Hoy los futbolistas saben que los van a apoyar más allá de que salgan o no las cosas”. Y respecto al mote Scaloneta, sentenció: “Me hinchan mucho los huevos con lo de la Scaloneta y por momentos me pone nervioso. No soy ni más ni menos que nadie. Solo intento que los cosas fluyan. Ojalá dure todo lo que sea”.
También habló de la salud de sus padres el entrenador argentino. “Mañana me voy a la clínica a visitarlos a los dos. Así es la vida. Por suerte ahora todo está un poco mejor”.
No se lo notó muy feliz a Scaloni en la conferencia. No se supo si estaba molesto por el resultado del juego o por algún tema particular de la organización. Así y todo, realizó un análisis del duelo. “Fue un encuentro trabado, duro, difícil. Brasil vino a hacer su partido, a intentar que no juguemos. El equipo se adaptó a las circunstancias”, dijo el DT. Y agregó: “El balance de la ventana es positivo porque sacamos 4 puntos ante dos rivales complejos. Este tipo de partidos permiten que el equipo madure”.
Un tema recurrente en Argentina es la posibilidad de enfrentar a rivales del continente europeo. Las pocas fechas FIFA no permiten tener demasiadas oportunidades. “Me han preguntado 500 veces lo mismo y siempre digo que no hay chance de jugar contra los de Europa. Entonces, jugaremos con los que nos toquen. Igual, no hay rivales superiores a los que tenemos en Sudamérica. Sí pueden ser distintos, pero no superiores”, contestó el nacido en Pujato. Y explicó porqué se inclinó por Molina en el lateral derecho: “Nahuel necesita de este tipo de partidos y era una linda prueba. Lo importante es tener sabia nueva que empuje desde atrás”.
En la conferencia también habló Lisandro Martínez, que ingresó en el entretiempo por Leandro Paredes y se paró como volante central. “Me siento un jugador polifuncional. Donde el equipo me necesite voy a estar, sea de cinco o de lateral. Siempre hay que estar ahí ante una alternativa”, dijo el futbolista del Ajax.
Y cerró: “Todos mis compañeros juegan cada pelota como si fuera la última. Jugar estos clásicos es algo hermoso. Siempre vamos a tener cosas para mejorar y este equipo lo va a seguir haciendo porque está predispuesto al trabajo y al día a día. Hemos formado un gran grupo, que es lo fundamental para un equipo, con excelentes personas. Todos están predispuestos a cumplir lo que pide el entrenador y eso es lo que se ve en cada partido”.
San Juan. Especial.