Telesol Noticias
Deportes

entre el discurso negacionista de Bolsonaro y el momento crítico que se vive en todas las sedes

La Copa América primero desistió de su realización en Colombia donde un estallido social empeoraba el delicado escenario sanitario por la pandemia. Más tarde llegó el adiós a Argentina, que pasó de pretender organizar el certamen por completo a desligarse del compromiso mientras atraviesa el momento más fuerte de contagios y colapso del sistema de salud. Pero el lugar elegido parece ser el peor combo de todo lo anterior: el coronavirus no da tregua y los cortocircuitos políticos son cada vez más intensos en Brasil, donde la Conmebol decidió montar el show cueste lo que cueste.

La acción comenzará en Brasilia el 13 de junio con el choque entre la selección local y Venezuela. En esa misma capital donde la Argentina jugará contra Uruguay el viernes 18, se produjo hace un par de semanas una multitudinaria marcha organizada por empresarios ruralistas de la que participó el presidente, Jair Bolsonaro. “Hay algunos idiotas, los que dicen que hay que quedarse en casa. Si el campo se hubiera quedado en casa, ese que se quedó en casa hubiera muerto de hambre, ese idiota se hubiese muerto de hambre. Se quejan de todo”, disparó el presidente revalidando su postura negacionista.

La capital del país, en la que Bolsonaro obtuvo el 69% de los votos en las elecciones de 2018, es gobernada por Ibaneis Rocha, un conservador del Movimiento de la Democracia Brasileña (MDB), muy cercano al Gobierno federal.

En el centro de la escena, Jair Bolsonaro levanta la Copa América que ganó Brasil en 2019. Foto: AFP

En el centro de la escena, Jair Bolsonaro levanta la Copa América que ganó Brasil en 2019. Foto: AFP

Según informan los medios brasileños la imagen positiva de Bolsonaro bajó hasta alrededor del 20% y sus chances de reelección en 2022 son cada vez más lejanas. La Copa podría darle un envión, tal como ocurrió en 2019 cuando terminó levantando el trofeo en el Maracaná.

En 1918, la pandemia de la llamada “gripe española” obligó a postergar el certamen continental que iba a jugarse en Brasil y debió aplazarse un año. Ahora, no hay virus que detenga la sociedad entre Conmebol y Bolsonaro.

En Goiania, el intendente de la ciudad, Luiz Maguito Vilela, que había ganado las elecciones en noviembre pasado mientras estaba internado por coronavirus, falleció en enero tras permanecer 80 días en terapia intensiva. Allí se jugarán cinco partidos de fase de grupos y dos de cuartos de final. 

En Cuiabá, la capital de Mato Grosso, los habitantes están felices de recibir a Lionel Messi cuando la Argentina enfrente a Bolivia el 28 de junio. Mientras tanto, su intendente reclama que toda la población sea vacunada en forma urgente y masiva.

Es más, en el estadio Arena Pantanal, construido para el Mundial Brasil 2014, funciona un centro de test y de atención primaria a los infectados de Covid-19 cuyo funcionamiento será suspendido cinco horas antes de cada uno de los cinco partidos que allí se jueguen.

Así quedó armado el cronograma de partidos de la Copa América.

Así quedó armado el cronograma de partidos de la Copa América.

“No es aconsejable un espectáculo de este tamaño en Cuiabá porque no sabemos cómo será la movilización de la gente para la Copa América más allá de que serán sin público los partidos. Estamos en un momento difícil discutiendo asuntos de la salud de la población”, dijo el intendente Emanuel Pinheiro. La ciudad tiene más del 90% de su sistema de salud ocupado.

Pinheiro ya le pidió al Gobierno federal el envío masivo de 670 mil dosis extras de vacunas para acelerar el proceso con los 440.000 habitantes de Cuiabá. “Ya que nos eligieron, queremos compensaciones”, dijo.

El intendente pertenece al Movimiento de la Democracia Brasileña (MDB) y está enfrentado con el gobernador de Mato Grosso, el bolsonarista Mauro Mendes, quien dio el aval para la utilización del estadio que es administrado por el gobierno provincial.

Hasta el 3 de junio, Cuiabá registraba 2.897 muertes y 86.560 infectados de Covid-19 mientras que el estado de Mato Grosso acumulaba más de 410.000 casos y 11.037 fallecidos.

Activistas realizan un acto simbólico en Copacabana en homenaje a las víctimas del Covid-19. Foto: AP

Activistas realizan un acto simbólico en Copacabana en homenaje a las víctimas del Covid-19. Foto: AP

Bolsonaro habló por cadena nacional y defendió la realización del certamen. Su argumento es que ya se disputaron en Brasil partidos del campeonato local, estadual y de copas internacionales de clubes. El mensaje fue repudiado en las principales ciudades del país con cacerolazos.

San Pablo, que era una de las sedes elegidas en primer término, rechazó la propuesta debido a que se encuentra en fase roja, con cuarentenas intermitentes y con más del 80% del sistema sanitario ocupado.

Río de Janeiro, que tiene un porcentaje de ocupación de los centros de salud del 95%, ofrecerá dos estadios: el Nilton Santos, donde se jugarán siete encuentros, entre ellos el del debut de Argentina, ante Chile el 14 de junio; y el Maracaná, sede de la final del 10 de julio.

Fue la subsecretaria de Vigilancia en Salud de la Secretaría de Salud del estado de Río, Claudia Mello, quien confirmó a mediados de mayo la presencia de una nueva cepa de coronavirus, derivada de la de Manaos, La variante fue bautizada P.1.2 por ser una mutación de la P1, surgida en Amazonas en noviembre pasado y responsable de gran parte de la segunda ola en la región.

El intendente de Río es Eduardo Paes, quien ya se contagió dos veces de coronavirus. Reemplazó a principio de año al bolsonarista Marcelo Crivella, que fue destituido y detenido, acusado de participar en una red de sobornos, se oponía a la realización del certamen.

El presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez y el de Brasil, Jair Bolsonaro. Foto: Juano Tesone

El presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez y el de Brasil, Jair Bolsonaro. Foto: Juano Tesone

Paes, de perfil derechista, es crítico de Bolsonaro aunque comanda una ciudad en la que el presidente obtuvo el 66% de los votos en la segunda vuelta electoral de 2018. Si bien el intendente se oponía por lo bajo a recibir la Copa, terminó cediendo aunque ratificó la prohibición del público en espectáculos deportivos (dispuesta en el decreto 48.425) ante el rumor de que Conmebol pretendía que la final se jugara con un porcentaje de aforo en el Maracaná.

Río es la única ciudad futbolera que tendrá partidos. No lo aceptaron San Pablo, Belo Horizonte, Porto Alegre y Salvador, entre otras.

“No descartamos una cuarta ola del Covid. Hoy tenemos suficiente cantidad de camas para atender una demanda similar a la que hubo en la tercera. ¿Pero qué haremos si la cuarta ola fuera peor que la tercera?”, se preguntaba el secretario de Salud de Río, Alexandre Chieppe antes de saber que la Copa se jugaría en Brasil.

Al día siguiente de ratificar la organización del torneo, Brasil reportó 95.601 nuevos casos de coronavirus, la segunda cifra más alta desde el inicio de la pandemia. Y se acerca al medio millón de muertos.

Noticias relacionadas

la respuesta de Lewandowski a los dichos de Messi, tras recibir el Balón de Oro

La historia de Luciano Antonelli, el argentino que fue elegido como uno de los 10 mejores entrenadores de futsal del mundo

quién es Matías, el hijo del DT que jugará en la Reserva

Please enter an Access Token