Una maniobra que parecía perfecta fue desbaratada en el último minuto. La Justicia Federal de Salta detectó que tres “ladrillos” de marihuana destinados a ser incinerados eran en realidad plastilina, lo que derivó en una investigación penal contra 11 efectivos de la Policía. El hallazgo encendió todas las alarmas y puso bajo sospecha a agentes de la Dirección General de Drogas Peligrosas y de la División de Investigaciones Complejas de Orán.
El caso comenzó semanas atrás, pero explotó el 27 de junio, cuando personal de la División Antidrogas de la Policía Federal Argentina (PFA) se presentó en la empresa INZA, en la ciudad de Palpalá, Jujuy, para supervisar la destrucción de un lote de dos toneladas de droga. Todo se realizaba con normalidad hasta que algo llamó la atención durante el procedimiento de rutina: una prueba de narcotest dio negativo.
Los tres “ladrillos” de supuesta marihuana habían llegado en una caja sellada, con cadena de custodia, y fueron pesados y analizados frente a testigos. Sin embargo, el resultado del reactivo de Gendarmería fue contundente: no era droga. Cuando abrieron los paquetes, hallaron una masa amarilla gomosa, similar a plastilina.
Tras la sorpresa inicial, se cotejaron las muestras testigo que habían sido tomadas al momento del decomiso, y allí sí se confirmó que originalmente se trataba de cocaína. Todo indica que en algún momento dentro de la Dirección de Drogas Complejas (DICOM) de la Policía de Salta en Orán, los verdaderos estupefacientes fueron reemplazados con una imitación para pasar desapercibidos durante la incineración.
« — Para ver la nota completa, ingrese a la url de la nota — »