Durante la charla con Gabriel Anello, Espert detalló que el pago correspondía a una consultoría financiera que debía desarrollarse en Guatemala, donde la empresa de Machado tenía intereses mineros. Sin embargo, el confinamiento global de 2020 interrumpió sus planes: “Había empezado a tomar contacto, a desarrollar, a anotarme preguntas. Gasté un montón de tiempo en eso. El disparador del trabajo era viajar a Guatemala para conocer la mina como corresponde”, explicó.
El diputado libertario sostuvo que nunca pudo concretar ese viaje, lo que dejó el trabajo a medio camino: “Cuando trabajaba en banca de inversión, si tenías un proyecto de reestructuración entre manos, tenías que ir a la empresa sí o sí. Pero se cortó todo por la pandemia”, relató. A pesar de ello, insistió en que destinó tiempo y esfuerzo al proyecto antes de que se frustrara.
Además, Espert afirmó que desconocía los vínculos ilegales del empresario en ese momento: “Después, cuando lo encuentran involucrado en narcotráfico, fue un shock. Pánico. Para mí se terminó todo ahí”, reconoció, marcando distancia del caso y asegurando que no tuvo ninguna participación ni beneficio posterior.
En otro tramo de la entrevista, el economista insistió en su inocencia y en que su nombre fue injustamente “ensuciado”: “No tengo nada que ver con Machado ni con sus negocios. Lo mío fue un trabajo profesional que no llegó a concretarse por razones obvias. Punto”, remarcó. A su vez, lamentó el daño que las versiones mediáticas generaron en su entorno familiar y político.
« — Para ver la nota completa, ingrese a la url de la nota — »