Facundo Campazzo comenzó su camino en los playoffs de la NBA, la instancia de eliminación directa en la que 16 equipos dirimirán el campeón de la mejor liga de básquet del mundo. La serie de primera ronda enfrenta a los Denver Nuggets del cordobés ante Portland Trail Blazers y será al mejor de 7 partidos, pero el arranque estuvo lejos de ser el ideal: fue derrota para el argentino 123 a 109.
El cordobés, como ha sido norma desde que el base titular y estrella del equipo, Jamal Murray, sufriera una lesión ligamentaria que lo dejó afuera para toda la temporada, fue titular en el equipo de Michael Malone.
Y si bien jugó un interesante partido no pudo evitar la derrota. Facu completó una planilla de 8 puntos (2 triples), 5 asistencias, 3 rebotes, 2 robos y 1 tapa, pero sucumbió ante un descomunal Damian Lillard, que la rompió con 34 puntos, 13 asistencias y 5 triples.
El argentino, como era de esperarse, además de estar a cargo de “subir” la pelota para su equipo con la posesión a favor, tuvo la difícil tarea de marcar a Damian Lillard, la estrella rival.
Y de arranque comenzó a hacer su aporte, con una asistencia hacia atrás para Aaron Gordon tras filtrarse por la línea de fondo y luego con un triple para poner el 13-7.
Campazzo mostró esa agresividad incluso para cargar un rebote ofensivo y Denver, de arranque, contó con aportes anotadores de cuatro de sus cinco titulares en la primera mitad del primer cuarto.
Pero al mismo tiempo le jugó en contra, porque en menos de 7 minutos acumuló dos faltas personales y al DT Malone no le quedó otra que reemplazarlo para protegerlo.
Esa electricidad habitual es algo para tener en cuenta en estas instancias y más contra una estrella como Lillard: los arbitrajes están listos para protegerlos y cobrarles cualquier infracción a favor. Y no se trata de una queja: es una realidad que está establecida y a la que no queda otra que aceptar.
La no sanción a LeBron James por haber violado los protocolos sanitarios de la liga en una salida, lo que le permitirá jugar el primer partido ante Phoenix Suns, es una prueba cabal de los comportamientos disciplinarios. Y el arbitraje no es la excepción.
De la mano del triple de parte de los hombres de la segunda unidad (el inoxidable Carmelo Anthony metió 3 de 3; Anfernee Simons, 2 de 2 y Norman Powell, 1-1), Portland sacó ventaja sobre el final del primer parcial para irse al primer mini descanso 35-30 arriba.
Campazzo regresó a 7m30 del final del segundo cuarto, junto a Lillard. En ese momento también reapareció Nikola Jokic, que fue fuertemente tomado por el bosnio Jusuf Nurkic. En ese momento hubo una buena conexión con Campazzo, que vio el hueco por la atención que le prestan a su compañero serbio, se filtró y engañó a la defensa para asistirlo.
En este lapso fue importante Paul Millsap con 9 puntos generados entre los que anotó él mismo y los que asistió. Mucho más acertado de cara al aro y ante una merma en el triple de los Trail Blazers, los Nuggets se pusieron 49-47 arriba a 5m35.
A falta de 1m49, Malone volvió a sentar a Facundo y Denver cerró el primer tiempo ganando 61-58. Sólo en ese lapso Jokic sumó 22 puntos, aunque pagó en defensa, donde los perimetrales de Portland buscaron usar el pick-and-roll y forzar al pivote a quedar emparejado con los ligeritos, que con su velocidad podían anotarle con más facilidad.
En el arranque del tercer período fue vital el cordobés para sacar la ventaja máxima del local hasta el momento: triple y dos asistencias que llevaron el partido a 9 de diferencia (71-62 y 73-64).
Sin embargo, con el correr de los minutos Portland volvería a encontrar el triple y en un lapso de cinco minutos marcaría un parcial de 24 a 11 para pasar a ganar 84-80. Y Lillard, que en ese tercer cuarto anotó 15 puntos, condujo a los suyos a llegar al último período 10 puntos arriba (96-86).
Era elocuente: si uno de los perímetros más calientes de la NBA encontraba los caminos para anotar casi un 50% de triples (16-33) y enfrente la mano estaba helada (9-27), todo se hacía cuesta arriba. Sobre todo porque ni siquiera Denver desnivelaba en penetración: Portland sacó muchas más faltas y las resolvió mucho mejor que los Nuggets (14-15 para la visita contra 3-6 para el local al inicio del último período)
Desde afuera, Campazzo vio cómo al comienzo de los 12 minutos finales Portland sacaba la máxima de 12 (102-90), pero también cómo de la mano de Michael Porter Jr. Denver recortaba a 4 (102-98).
El cordobés y Jokic regresaron a 6m20 del final y el equipo abajo 107-101.
Y tardó apenas segundos en robarle una pelota a Lillard con su característica velocidad de manos.
Pero por la vía del triple y con un par de dobles más falta Portland se volvió a escapar, esta vez a 15 (118 a 103) a 3m20, una diferencia casi decisiva. Campazzo siguió mostrando su estilo combativo, pero la flojísima defensa de Denver condujo al local a una derrota inevitable.
Los Trail Blazers anotaron 19 triples con 47,5% de efectividad, 18-19 libres que mostraron agresividad para atacar el aro y los Nuggets fueron la contracara: 50% de cancha, pero apenas 30% a distancia y 50% en sólo ocho libres.
La serie quedó 1-0, Portland se robó la ventaja de localía y demostró que será un rival durísimo.