La crisis del sector textil en San Juan suma un nuevo capítulo. La empresa Vicunha Textil anunció que detendrá su producción por un período de 45 días, una medida que afectará a casi 400 trabajadores, quienes percibirán entre el 70% y el 74% de su salario, según el promedio de categorías. La situación se da en un contexto de fuerte retracción de la actividad, vinculada principalmente al aumento de las importaciones.
Desde la Asociación Obrera Textil (AOT), su secretario general, Sergio Olivares, describió un escenario complejo que se arrastra desde hace meses. “Estamos viviendo una situación muy difícil. Durante todo el año se han venido dando suspensiones, la gente estaba una semana de la quincena en la casa, parada, con un porcentaje de su sueldo”, explicó.
Según detalló el dirigente gremial, estas suspensiones se repitieron durante gran parte del año, con apenas “dos o tres meses que no se dio esa situación”. Para Olivares, la principal causa está vinculada a la apertura de importaciones.
En ese sentido, apuntó directamente al ingreso de productos del exterior, especialmente desde Asia. “El gobierno le ha abierto y dado libertad sin ningún arancel, sin nada, entonces la gente hoy pide en una aplicación como Temu y le sale 2 pesos, y eso no paga impuestos, no paga nada”, sostuvo. Y agregó: “Un empresario que tiene todo un círculo armado, en el sentido de mano de obra, productos, no puede afrontar con esos precios”.
La caída de la producción tuvo un impacto directo en el empleo. Olivares confirmó que no se incorporó nuevo personal y que en julio se produjeron entre 40 y 50 despidos en Vicunha. “Es una empresa que venía produciendo cerca de los 2 millones de metros de tela por mes y, de golpe, empezaron a producir 1.500 millón. Entonces obviamente empieza a sobrar gente y sacan. Y en la actualidad ha terminado produciendo 1 millón de metros, apenas la mitad”, señaló.
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