A partir de la medianoche de este viernes comenzó un paro de los trabajadores del transporte público de pasajeros en San Juan. Pero antes de iniciar la medida, la Subsecretaría de Trabajo había dictado la conciliación obligatoria para evitar el conflicto, algo que no fue acatado por la UTA (Unión Tranviaria Automotor). Ahora, el organismo que regula las relaciones laborales sancionó al gremio y lo intimó a retomar el servicio.
En consecuencia, el subsecretario Oribe declaró la “ilegalidad de las medidas de acción directas e indirectas convocadas por la Unión Tranviarios Automotor, en virtud de la normativa legal vigente”.
La resolución también ordena “el cese inmediato de las acciones directas iniciadas por el sindicato bajo apercibimiento de aplicar las sanciones legales correspondientes”.
Para la Subsecretaría hubo “infracciones muy graves”. La sanción es una multa del 50 al 2.000% del valor mensual del salario del Salario Mínimo, Vital y Móvil vigente al momento de la constatación de la infracción, por cada trabajador afectado. El monto podrá conocerse una vez que se defina con precisión la cantidad de trabajadores que tiene la UTA.
San Juan amaneció sin el servicio de colectivos y se notó en las calles de la provincia. Los colectiveros vienen reclamando desde el miércoles, que aún no tenían depositado el sueldo correspondiente a enero, y finalmente este viernes concretaron la medida de fuerza.
Por su parte, el sector empresario calificó la huelga como una medida “antisolidaria y fuera de lugar”. Así lo afirmó Ricardo Salvá titular de la Asociación Transporte Automotor de Pasajeros (ATAP).
“Vemos una medida exagerada irracional por parte del gremio de UTA. Creemos que debieran recapacitar”, dijo Salvá.