Madrid, 2 ago (EFE).- El editor Paul Duncan, editor de Taschen, tiene claro que “debería de haber más George Lucas” en el mundo y por eso en la nueva entrega que ha realizado sobre el proceso de creación de “Star Wars. Episodios I-III” ha querido ahondar en el “cómo” el cineasta ha conseguido crear este universo único.
Así lo considera porque, según cuenta a Efe, lo que el cineasta estadounidense ha conseguido con “Star Wars” no es solo una serie de películas que van más allá del género de la fantasía, sino que ha creado un “universo simbiótico” gracias a la innovación tecnológica con la que ha trabajado, justo lo que refleja Duncan en el libro “Star Wars. Los archivos. Episodios I-III 1999-2005” (Taschen).
“Generalmente cuando haces una entrevista esperas la respuesta perfecta, pero cuando entrevistaba a George Lucas lo que me interesaba es que sabía que no tenía respuestas. El empezó a contarme sobre la filosofía que hay detrás de estas películas y esa simbiosis que hay entre sus dos mundos, el de los personajes y la realidad”, explica Duncan.
Por eso, para entender lo que hay en la mente de Lucas el editor británico partió con una “intención”, la de encontrar no el “por qué” sino el “cómo” ha hecho el cineasta estas películas.
“Quería presentar la filosofía de George, presentar el cómo se hicieron las películas e imaginar ese cómo se hizo en un libro que muestre todo lo que ha tenido que crear en el mundo digital”, añade.
Esto es lo que muestra este tomo de gran tamaño y de 6,4 kilos de peso porque, según lo afirma el propio Lucas en el prólogo de la obra, para hacer estas películas tuvo que “desarrollar la tecnología necesaria”.
“Mientras hacía ‘Star Wars’ muchas cosas quedaban fuera de mi alcance: no podía mostrar grandes escenas callejeras y no podía tener personajes extraterrestres que no fueran figuras antropomórficas caminando por las calles. Tuve que enfrentarme a ciertas preguntas: ¿cómo creo a Jabba e Hutt? ¿Cómo creo a Yoda, que apenas mide 45 cm de altura y hago que interprete una escena de manera creíble?”, expresa Lucas (California, Estados Unidos, 1944) en el prólogo.
Cuestiones a las que encontró respuesta gracias a la tecnología que aplicó en cada una de las cintas. Por ejemplo, y en el caso de Yoda en el “Episodio II”, Lucas tuvo que crear una réplica digital “creíble” de este “hombrecillo verde” que se “pareciera lo suficiente” a la marioneta original.
Una explicación que recoge Duncan en esta obra que contiene además grandes fotografías sobre esos escenarios imaginarios en los que se desarrollan las principales acciones, como el de la escena del beso entre Padmé y Anakin en el “Episodio II”, lugares con una base real rodada en Nueva Zelanda.
“Quiero enseñar cómo fue el viaje de Lucas, cómo lo hizo y cómo encontró a los personajes”, matiza el editor de Taschen, autor de otros libros sobre Almodovar, Hitchcock o la anterior entrega de “Star Wars” en la que abarca el trabajo de Lucas entre 1977 y 1983.
Sobre los personajes, reconoce Duncan, le resulta difícil quedarse con alguno, pero no puede dejar de opinar lo que piensa sobre uno de los pilares de esta historia desarrollada en galaxias lejanas: Anakin.
“Anakin no necesita ayuda de nadie para crear su poder, y todos los problemas que tiene se los ocasiona él, y esto hace crecer al personaje y demuestra lo buen escritor que es George”, apunta.
Y es que, si algo siente Ducan por el creador americano es admiración por esa “filosofía” que ha plasmado en “Star Wars” y por cómo trabaja junto a su equipo.
“He conocido a mucha gente que ha trabajado para George y son muy creativos (…) Trabaja con ellos muy de cerca. Por eso necesitamos más George Lucas”, concluye sobre el protagonista de este libro que está a la venta por 150 euros al ser una edición de lujo.
Pilar Martín.