Sebastián Báez hizo historia este domingo. Es que el bonaerense acaba de completar la semana de su vida al derrotar en la final de Estoril a Frances Tiafoe por 6-3 y 6-2 y lograr el primer ATP de su carrera.
Báez, que hasta esta semana ocupaba el puesto número 51 del ránking ATP, venció al estadounidense, quinto preclasificado del torneo, en una hora y 14 minutos y este lunes aparecerá por primera vez entre los mejores 50 jugadores del planeta. Porque saltará hasta el 40° lugar y quedará como el tercer argentino mejor rankeado, detrás de Diego Schwartzman y Federico Delbonis.
El bonaerense, de 21 años y una de las mejores raquetas de la NextGen argentina, tuvo que remarla desde atrás en el primer set. Porque Tiafoe, que buscaba su segunda corona tras la que ganó en 2018 en Delray Beach, lo sorprendió en el primer game y le robó el saque, para adelantarse después 2-0.
La reacción de Báez no tardó en llegar. Recuperó el quiebre en el cuarto juego y concretó otro en el sexto para sacar una ventaja (4-2) que le permitiría cerrar un rato después el set inicial.
En el segundo parcial, que arrancó más parejo, el argentino recién pudo desnivelar el marcador en el quinto game, pero se anotó dos quiebres al hilo (en ese juego y en el séptimo) para quedar 5-2 arriba. Y, con el título al alcance de la mano, no dudó y selló el triunfo con su servicio.
“Why not me?” (¿Por qué no yo?) había escrito el argentino en el lente de la cámara tras cada uno de los triunfos que lo habían llevado a la final del torneo, la segunda para él tras la que jugó en febrero en Santiago de Chile (perdió con el español Pedro Martínez). Luego de derrotar a Tiafoe, firmó su presentación oficial en el circuito más grande del tenis mundial con un “Yes, is me!” (Sí, soy yo).
La victoria le puso el broche de oro a una semana impecable de Báez, que en su camino al título derrotó a rivales de mucha jerarquía y más experiencia que él. Tras el debut sólido ante el portugués Joao Sousa, de 33 años y proveniente de la qualy; levantó una desventaja de un set (1-6) ante el croata Marin Cilic, ex número tres del mundo y campeón del US Open 2014 en la segunda ronda.
Volvió a arrancar desde atrás para vencer en la tercera al francés Richard Gasquet, otro ex top 10, de 35 años y dueño de 15 trofeos ATP, en cuartos de final. Y en semis, consiguió su tercera victoria de esta temporada ante el español Albert Ramos Viñolas, 31° del ranking, a quien había vencido ya en Australia y en Santiago.
“Disfruté mucho de esta semana. Y estoy muy orgulloso de lo que logré”, comentó Báez durante la ceremonia de premiación, poco después de celebrar la consagración con su entrenador de toda la vida, Sebastián Gutiérrez, al ritmo del clásico “Dale campeón, dale campeón” con acento bien argentino.
“Gracias por el apoyo de todos y espero volver el año que viene”, agregó. Y le dedicó unas palabras a su rival: “Frances, sos una inspiración. ¿Por qué no yo y por qué no vos?”.
Esa dedicatoria tiene su razón de ser. Es que la frase que Sebastián escribió en la cámara luego de cara triunfo es la misma que el estadounidense lleva siempre consigo en una pulsera.
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