La tarde sanjuanina se tiñó de bronca y desilusión este lunes tras conocerse el veredicto absolutorio en el caso por la desaparición del ingeniero Raúl Tellechea, ocurrida hace más de dos décadas. Apenas unos minutos después de que el Tribunal Oral Federal de San Juan diera a conocer su decisión de absolver a todos los imputados, un grupo de personas que se congregó frente al edificio judicial para manifestar su malestar.
Los gritos de “¡Injusticia, injusticia!” se repitieron una y otra vez, mientras el ambiente se volvía cada vez más tenso. Familiares de Tellechea, junto a organizaciones sociales y vecinos que siguieron el juicio, expresaron su profunda decepción con el fallo que, según manifestaron, “vuelve a instalar la impunidad después de 21 años de lucha”.
El clima fue de indignación y desconsuelo. Algunos manifestantes portaban carteles y pancartas reclamando justicia por el ingeniero, desaparecido en septiembre de 2004, mientras otros lloraban o discutían con quienes intentaban mantener la calma. Personal policial se desplegó en el lugar para evitar incidentes mayores, aunque las protestas se desarrollaron en un marco de tensión constante.
La escena contrastó con el silencio del interior del tribunal, donde los jueces habían destacado la necesidad de continuar la búsqueda de Tellechea pese a la absolución de los acusados.
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