En el Día de San Cayetano, Telesol te cuenta la historia de Carlos Avendaño, un sanjuanino de 82 años, quien resalta entre las manifestaciones de fe que se viven en San Juan.
Desde hace más de dos décadas, Carlitos, como lo llaman con cariño en el barrio, es el custodio del santuario del santo del pan y del trabajo, ubicado en el Parque Industrial del departamento Chimbas. Un rol que asumió con total compromiso tras jubilarse, consagrando su vida al servicio de la comunidad.
Cada día, sin excepción, Carlos recorre los 300 metros que separan su casa del templo. Porta en su mano el que él llama “el llavero de San Pedro”, con el que abre y cierra las puertas del santuario los 365 días del año. “Es una inmensa alegría tener las llaves del santuario, pero también una responsabilidad muy grande”, asegura con voz serena y mirada emocionada.
Un legado de fe y comunidad
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