Un hombre fue condenado a cumplir una pena en el Servicio Penitenciario Provincial por cometer los delitos de abuso sexual contra las hijas de su pareja. El imputado cometió los ultrajes en la vivienda donde convivían.
Fuentes judiciales expusieron que, conforme los elementos de convicción incorporados al legajo fiscal, quedó acreditado que el acusado cometió los delitos contra las víctimas cuando una tenía 12 años y la otra 19 años.
Por lo sucedido, la Justicia declaró la culpabilidad y condenó al imputado a sufrir la pena de 3 años en el Servicio Penitenciario Provincial. Lo encontraron autor penalmente responsable de los delitos de “abuso sexual simple agravado por la convivencia”. Además, el Juez de Garantía ordenó la prisión preventiva hasta tanto quede firme el acuerdo y ordenó la unificación de esta pena con otra condena anterior.