La industria argentina utilizó en junio el 58,8% de su capacidad instalada, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Aunque el dato muestra una leve mejora respecto de mayo y también en la comparación interanual, el sector acumula siete meses consecutivos sin superar el 60%, reflejando un escenario de actividad todavía por debajo de su potencial.
De acuerdo con el relevamiento oficial, los bloques sectoriales con mayor utilización fueron la refinación del petróleo (83%), papel y cartón (68%), industrias metálicas básicas (64,3%), sustancias y productos químicos (64,0%) y productos alimenticios y bebidas (62,7%).
En contraste, los rubros con menor nivel de uso fueron productos minerales no metálicos (55,1%), edición e impresión (52,8%), industria automotriz (52,0%), productos textiles (50,4%), metalmecánica excepto automotores (45,9%), productos de caucho y plástico (41,7%) y productos del tabaco (40,2%).
Especialistas advierten que, si bien algunos sectores muestran señales de recuperación, el bajo promedio general refleja una demanda interna débil, dificultades de inversión y limitaciones en el acceso a insumos. La evolución de la actividad industrial en los próximos meses dependerá en gran medida de la estabilidad macroeconómica y del repunte del consumo.