Un violento episodio que tuvo lugar el lunes pasado en Capital terminó con una resolución judicial que impone fuertes obligaciones a la responsable. Una mujer que causó daños en un vehículo particular y en el área de Urgencias del Hospital Guillermo Rawson deberá abonar un total de $500.000 en concepto de reparación.
La disposición se tomó en el fuero de Flagrancia y fue homologada por un juez tras una audiencia de formalización. El acuerdo alcanzado fue el de suspensión de juicio a prueba (probation), figura que se aplica en delitos leves como alternativa al juicio oral, siempre que el imputado repare el daño ocasionado y se comprometa a cumplir determinadas pautas de conducta.
En este caso, la mujer deberá pagar $300.000 a la propietaria del auto dañado y $200.000 al nosocomio, además de realizar 150 horas de trabajo comunitario y someterse a un tratamiento por adicciones.
Fuentes judiciales aclararon que la imputada no contaba con antecedentes penales y atraviesa una situación de vulnerabilidad social, factores que fueron considerados al momento de definir la medida alternativa.