A casi dos décadas de su consagración en Patito Feo, Laura Esquivel vive un momento de transformación. La artista, de 31 años, dejó atrás Buenos Aires para instalarse en Italia, donde lleva adelante una gira de 13 shows como parte del festival Teenage Dream.
Su último disco, homónimo, es el eje de sus presentaciones, aunque no faltó el guiño al público local: una versión en italiano de Un día a la vez.
El vínculo de Esquivel con Italia no es casual. La serie que la lanzó a la fama tuvo un impacto duradero en ese país, y su regreso el año pasado, junto a Brenda Asnicar, avivó la nostalgia de sus seguidores.
Ahora, con una agenda cargada de conciertos, la cantante recorre ciudades como Roma, Milán y Nápoles en combi junto a su banda.
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