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LONDRES, 31 ene (Reuters) -Reino Unido instó el lunes al presidente ruso, Vladimir Putin, a “alejarse del precipicio” con respecto a Ucrania, advirtiendo que cualquier incursión desencadenaría sanciones contra empresas y personas próximas al Kremlin.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que la amenaza de tales medidas, que replica las esbozadas por un alto cargo de EEUU tras el aumento de las tropas rusas cerca de Ucrania, equivaldría a un ataque contra las empresas rusas.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, consideró la advertencia británica como “muy preocupante”, y dijo que tales declaraciones socavaban el atractivo de las inversiones británicas y serían contraproducentes al perjudicar a las empresas británicas.
“No es frecuente ver o escuchar amenazas tan directas sobre ataques a empresas”, dijo Peskov. “Un ataque de un determinado país a las empresas rusas implica medidas de represalia, y estas medidas se formularán en función de nuestros intereses si es necesario”.
Desde la caída de la Unión Soviética en 1991, Londres se ha convertido en el principal centro mundial al que se ha dirigido dinero desde las antiguas repúblicas soviéticas.
Los opositores a Putin han pedido repetidamente a Occidente que sea estricto con el dinero ruso, aunque los oligarcas y dirigentes rusos siguen haciendo alarde de su riqueza en los destinos más lujosos de Europa.
El primer ministro británico, Boris Johnson, tiene previsto viajar a Ucrania y también hablará con Putin por teléfono.
“Lo que le diré al presidente Putin, como ya he dicho antes, es que creo que todos tenemos que dar un paso atrás, y creo que Rusia tiene que dar un paso atrás”, dijo Johnson a los periodistas.
LISTA DE ÉLITES RUSAS
Estados Unidos, la Unión Europea y Reino Unido han advertido a Putin de que impondrá duras sanciones si Rusia ataca a Ucrania tras reunir decenas de miles de soldados cerca de la frontera.
Un alto cargo de la Administración Biden dijo que Washington y sus aliados han preparado una lista de las élites rusas cercanas a Putin para golpear con sanciones económicas.
“Los individuos que hemos identificado están dentro o cerca de los círculos internos del Kremlin y juegan un papel en la toma de decisiones del Gobierno o son, como mínimo, cómplices del comportamiento desestabilizador del Kremlin”, dijo el responsable en Washington, hablando bajo condición de anonimato.
Estados Unidos ha desarrollado sanciones específicas tanto para las élites rusas que cumplen los criterios como para sus familiares, y estos esfuerzos se están llevando a cabo en coordinación con los aliados y socios de Estados Unidos, dijo esta fuente.
Rusia niega estar planeando atacar a Ucrania y exige garantías de seguridad, incluida la promesa de la OTAN de no permitir que Kiev se una a la alianza.
El Gobierno británico presentará esta semana una nueva legislación para ampliar el alcance de las sanciones que puede aplicar a Rusia con el fin de impedir la agresión contra Ucrania, dijo el domingo la ministra de Asuntos Exteriores, Liz Truss.
La ministra dijo que Londres debería poder apuntar a “cualquier empresa de interés para el Kremlin y el régimen de Rusia” y que “no habría ningún lugar donde esconderse para los oligarcas de Putin”.
De visita en Hungría, el secretario de Defensa británico, Ben Wallace, dijo que era importante desactivar la crisis, ya que una guerra provocaría una mayor inestabilidad, un aumento de los precios del combustible y de los flujos migratorios.
Wallace expresó su apoyo al viaje que el primer ministro húngaro, Viktor Orban, tiene previsto realizar el martes a Rusia para mantener conversaciones con Putin, y añadió: “Tenemos que desescalar la situación y defender el derecho a la soberanía de Ucrania”.
Reino Unido ha impuesto sanciones a unas 180 personas y 48 entidades desde que Rusia se anexionó Crimea de Ucrania en 2014.
En la lista de sanciones hay seis personas que según Londres son cercanas a Putin: los empresarios Yuri Kovalchuk, Arkady Rotenberg y Nikolai Shamalov, el exoficial del KGB Sergei Chemezov, el secretario del Consejo de Seguridad ruso Nikolai Patrushev y el jefe del Servicio Federal de Seguridad (FSB) Alexander Bortnikov.
Las sanciones permiten a Reino Unido congelar los activos de los individuos y prohibirles la entrada en el país.
(Reporte de Guy Faulconbridge, William James y Dmitry Antonov; edición de Michael Holden y Timothy Heritage; traducción de Flora Gómez)