Tres turistas bonaerenses vivieron momentos de desesperación en el dique Punta Negra cuando uno de sus kayaks volcó y la tripulante no pudo reincorporarse a la embarcación. El hecho ocurrió en inmediaciones del cerro La Sal y fue resuelto gracias al protocolo de rescate activado por el departamento Náutica de la Secretaría de Deporte, dependiente del Ministerio de Turismo, Cultura y Deporte.
Los protagonistas fueron Ulises Zavatto (18), su hermana Alma (15) y su madre Marisa Sarlingo (49), todos de Laferrere. El grupo había alquilado dos kayaks —uno individual y otro doble— sin que el prestador informara su ingreso a la guardia. Mientras los jóvenes navegaban juntos, la mujer iba sola y volcó, quedando imposibilitada de volver a subir debido al peso de una campera mojada y a que llevaba un perro como mascota.
Ulises logró llegar a la orilla y dar aviso al personal de seguridad. En minutos, los rescatistas llegaron al lugar y encontraron a la mujer con signos de hipotermia, temblores y dificultades para hablar o moverse. Fue envuelta en abrigo, trasladada a la camioneta de guardia y estabilizada durante 40 minutos con calefacción y bebidas calientes.
La víctima agradeció la intervención: “Fue como dos angelitos. Yo ya no podía moverme. Me envolvieron en sus propias camperas y me salvaron la vida. En mi vida voy a poder agradecerles”.
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