El declive en las ventas y el aumento constante de los costos operativos generan dificultades para las cadenas mayoristas y supermercados. Un ejemplo claro es la desactivación de locales por parte de Vea, parte del grupo chileno Cencosud.
Otra cadena implicada es Frávega, que cerró su local en Temperley sin avisar a sus empleados, una acción reciente tras el cierre previo de otro comercio en Pergamino, provincia de Buenos Aires.
En días recientes, el mayorista Caromar, presente en Capital Federal, Buenos Aires y Neuquén, entre otros lugares, anunció cierres imprevistos que implicaron despidos generalizados. Comenzando diciembre, la empresa cerró locales en Mar del Plata y San Justo, afectando a casi 80 empleados.
El Sindicato de Empleados de Comercio (SEC) denunció que “la empresa pretende abonar únicamente el 50% de las indemnizaciones, amparándose en el Artículo 247 de la Ley de Contrato de Trabajo”. Detallaron que la sede de San Justo fue la más golpeada con 63 despidos, y que en Mar del Plata se desvincularon 15 empleados. Asimismo, subrayaron que los cierres ocurrieron sin comunicación oficial previa.
« — Para ver la nota completa, ingrese a la url de la nota — »