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Al menos 56 combatientes rebeldes sirios proturcos murieron el lunes en varios ataques aéreos “rusos” contra un campo de entrenamiento en la provincia de Idlib, en el noroeste de Siria, afirmó el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).
El balance del ataque podría más elevado debido a que hay también un centenar de heridos en el campo del grupo Faylaq al Sham, una fracción rebelde siria al servicio de Turquía, atacado por la aviación rusa, dijo Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
Rusia ayuda militarmente al gobierno del presidente sirio Bashar al Asad en la guerra contra los grupos rebeldes y yihadistas.
Los ataques de lunes imputados por los rebeldes a Rusia mataron a “56 combatientes”, según un nuevo balance del director del OSDH, que en un primer momento informó de 34 víctimas mortales.
Moscú y Ankara negociaron en varias ocasiones un alto el fuego para el noroeste de Siria y una frágil tregua está en vigor desde marzo en el sector, a pesar de combates esporádicos.
lar/tgg/tp/zm/mar
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